Aunque vivimos en una época profundamente interconectada a través de internet, es difícil conocer a profundidad la diversidad de escenas y microescenas que se gestan y desarrollan a lo largo de Iberoamérica. Atados, como estamos, a ciertos canales, mediaciones y medios que privilegian ciertas escenas o regiones.
Países como Bolivia podrían ser el ejemplo perfecto de esto, pero es precisamente a través del networking que poco a poco se puede conocer de la música nueva que se está editando en el país andino. Así, en ciudades como Cochabamba se está generando una pequeña escena de músicos que están buscando expandir su sonido a través del shoegaze, el electro pop, la música experimental y el garage.
Nuson es un colectivo radicado en Cochabamba, cuya gestoría ya está empezando a dar sus primeros frutos. Fiestas, talleres, podcasts y la organización del Festival de Nueva Música, que desde 2016 convoca a músicos locales y de países vecinos. Este año ya se está preparando la cuarta edición, y como adelanto han publicado un compilado que reúne algunos artistas de la escena cochabambina.
“Lo que sucede es que en Bolivia hay que ampliar la diversidad de arte que existe en el país, no sólo enfocarse en el folklore y el rockpop al que estamos acostumbrados”, le dijo Alejandra Lanza, productora del festival, al diario Página Siete.
El compilado, que se puede escuchar vía Bandcamp, incluye 10 tracks donde destaca el sofisticado electro pop de Astronauta Suburbano o de Daniel Abud, y el indie rock de Chicas Delfín, Vagastarbundis y Passto. Sorprende también el noise experimental de Miss Solsticio de Invierno y Dr. Casco, y los paisajes estelares de Nuevos Románticos.
NC01 es apenas la punta del Iceberg de lo que puede traer la escena de Cochabamba al indie iberoamericano. La gestoría, los foros y los canales ya están ahí al alcance. Sólo resta escuchar. Y pasar la voz.